Post by Emannuel on Sept 6, 2005 15:20:20 GMT -5
Héctor "El Father" no estudió música, pero es un maestro del ritmo, al menos en el reggaetón. No sabrá nombrar exactamente las fallas de un tema, pero puede identificar con seguridad cuando algo suena mal.
Así es el rapero Héctor "El Bambino" –como también se le conoce– en su faceta de productor, en la que se estrenó en 1998 con el álbum debut de Don Omar, "The Last Don".
En medio de los preparativos para su concierto "The Bad Boy", que escenificará el 16 de septiembre, en el Coliseo de Puerto Rico, el exponente visitó el estudio de LunyTunes, en Carolina, para compartir detalles de una labor en que ha sido comparado dentro del reggaetón con figuras como Dr. Dre, uno de los productores más reconocidos en el hip hop.
"Me encargo de que las cosas salgan bien, los ritmos estén completos, dar los detalles para que una producción salga a la calle y la gente quede satisfecha con el sonido, con la grabación de voces, con todo", comenta de entrada el también empresario, dueño del sello discográfico Gold Star Music.
En palabras del también productor Naldo, quien contó con el apoyo del rapero para la preparación del álbum "Sangre nueva", es más simple todavía: "Yo hice to' el disco y a lo último él llegó y dijo, 'Aquí tienes que cambiar esto, aquí tienes que hacer esto otro y aquí se acabó el disco'".
Y luego de sus expresiones, ambos se echan a reír.
Héctor "El Father", quien también le produce al binomio de reggaetón Trébol Clan y la banda de rock Algarete, no suele visitar el estudio de grabación hasta una vez se haya dado por concluido el producto.
Después de todo, es parte de la dinámica del negocio.
"Emilio Estefan nunca ha tocado una cuerda para Shakira, créeme. Él se encarga de buscar quiénes van a tocar", puntualiza el intérprete del tema promocional "Calor", y quien participará mañana, miércoles, en un videochat en www.primerahora.com, a las 7:00 de la noche.
Para Naldo, sin embargo, la destreza auditiva que tiene su colega es genial, pues también es capaz de identificar el gancho de una canción. Así ocurrió con el coro de la intro en "Sangre nueva", el cual Héctor auguró que sería "un palo".
"Él no me sabe decir bien lo que falta, pero me dice cuando falta algo. Yo tengo que encontrar esa falla. Nosotros somos productores y hacemos el ritmo. Yo me pude chavar haciendo el ritmo toda la noche, pero si él llega y dice, 'El ritmo no va', no va", declara Naldo, graduado de canto en el Conservatorio de Música de Puerto Rico.
Además del músico –experto en la grabación de voces– la mezcla de sonidos de "Sangre nueva" estuvo a cargo de Nesty, Nely, Tainy, Bones y Tunes.
"A la persona que se sienta a hacer el ritmo, nosotros le pagamos el ritmo en el momento. Nadie te trabaja contento si tú no le das dinero", manifiesta Arnaldo Santos, su nombre completo.
–¿Uno puede saber más o menos cuánto se cobra por eso?
–Bueno, se cobra muy bien, declara, sin especificar de momento.
Luego explica que la paga a los productores musicales asciende, mínimo, a los $5.000 por ritmo, aunque el binonio LunyTunes ya cobra de $10.000 en adelante.
Esto, cuando hay intercambio monetario de por medio –por lo general si se trata de un exponente extranjero– pues dentro del género todavía se dan los acuerdos informales: un vocalista de reggaetón interviene en un disco, a cambio de que su colega productor le haga un ritmo para el suyo, y viceversa.
Luny cuenta que así fue como nació "Gasolina" de Daddy Yankee, reseña la revista Billboard en un reciente artículo, titulado "Reggaetón: Los contratos reemplazan los apretones de mano al género explotar"
Así es el rapero Héctor "El Bambino" –como también se le conoce– en su faceta de productor, en la que se estrenó en 1998 con el álbum debut de Don Omar, "The Last Don".
En medio de los preparativos para su concierto "The Bad Boy", que escenificará el 16 de septiembre, en el Coliseo de Puerto Rico, el exponente visitó el estudio de LunyTunes, en Carolina, para compartir detalles de una labor en que ha sido comparado dentro del reggaetón con figuras como Dr. Dre, uno de los productores más reconocidos en el hip hop.
"Me encargo de que las cosas salgan bien, los ritmos estén completos, dar los detalles para que una producción salga a la calle y la gente quede satisfecha con el sonido, con la grabación de voces, con todo", comenta de entrada el también empresario, dueño del sello discográfico Gold Star Music.
En palabras del también productor Naldo, quien contó con el apoyo del rapero para la preparación del álbum "Sangre nueva", es más simple todavía: "Yo hice to' el disco y a lo último él llegó y dijo, 'Aquí tienes que cambiar esto, aquí tienes que hacer esto otro y aquí se acabó el disco'".
Y luego de sus expresiones, ambos se echan a reír.
Héctor "El Father", quien también le produce al binomio de reggaetón Trébol Clan y la banda de rock Algarete, no suele visitar el estudio de grabación hasta una vez se haya dado por concluido el producto.
Después de todo, es parte de la dinámica del negocio.
"Emilio Estefan nunca ha tocado una cuerda para Shakira, créeme. Él se encarga de buscar quiénes van a tocar", puntualiza el intérprete del tema promocional "Calor", y quien participará mañana, miércoles, en un videochat en www.primerahora.com, a las 7:00 de la noche.
Para Naldo, sin embargo, la destreza auditiva que tiene su colega es genial, pues también es capaz de identificar el gancho de una canción. Así ocurrió con el coro de la intro en "Sangre nueva", el cual Héctor auguró que sería "un palo".
"Él no me sabe decir bien lo que falta, pero me dice cuando falta algo. Yo tengo que encontrar esa falla. Nosotros somos productores y hacemos el ritmo. Yo me pude chavar haciendo el ritmo toda la noche, pero si él llega y dice, 'El ritmo no va', no va", declara Naldo, graduado de canto en el Conservatorio de Música de Puerto Rico.
Además del músico –experto en la grabación de voces– la mezcla de sonidos de "Sangre nueva" estuvo a cargo de Nesty, Nely, Tainy, Bones y Tunes.
"A la persona que se sienta a hacer el ritmo, nosotros le pagamos el ritmo en el momento. Nadie te trabaja contento si tú no le das dinero", manifiesta Arnaldo Santos, su nombre completo.
–¿Uno puede saber más o menos cuánto se cobra por eso?
–Bueno, se cobra muy bien, declara, sin especificar de momento.
Luego explica que la paga a los productores musicales asciende, mínimo, a los $5.000 por ritmo, aunque el binonio LunyTunes ya cobra de $10.000 en adelante.
Esto, cuando hay intercambio monetario de por medio –por lo general si se trata de un exponente extranjero– pues dentro del género todavía se dan los acuerdos informales: un vocalista de reggaetón interviene en un disco, a cambio de que su colega productor le haga un ritmo para el suyo, y viceversa.
Luny cuenta que así fue como nació "Gasolina" de Daddy Yankee, reseña la revista Billboard en un reciente artículo, titulado "Reggaetón: Los contratos reemplazan los apretones de mano al género explotar"